Hoy 3 de diciembre se celebra el Día Internacional de las Personas con Discapacidad, establecido por la Asamblea General de las Naciones Unidas mediante resolución 47/3 en el año 1992. El objetivo de este día es promover los derechos y el bienestar de las personas con discapacidades en todos los ámbitos de la sociedad y el desarrollo, así como concienciar sobre su situación en cualquier aspecto de la vida política, social, económica y cultural.
Se calcula que una de cada diez personas tiene problemas auditivos graves, una importante discapacidad sensorial, de los cuales 220.000 son implantados cocleares en Europa. En España concretamente contamos con más de 18.000 personas usuarias de implante coclear.

En el Informe Mundial de la Audición de la OMS de este año 2021, los datos de cara a un futuro no tan lejano son alarmantes. La previsión para el año 2050 es que existan en todo el mundo 700 millones de personas con problemas graves de pérdida de audición.
Este informe afirma también, que actualmente 1.000 millones de adultos y jóvenes corren el riesgo de sufrir pérdida auditiva permanente pero que es evitable. Por este motivo surge la necesidad de hacer llegar la información a la sociedad en general para que se conciencie en el cuidado diario de su salud auditiva. El uso de auriculares más de una hora al día o el volumen excesivo con el que se escucha música son dos de los problemas más significativos.
En 2019 la pérdida auditiva fue el tercer motivo de discapacidad a nivel mundial y la principal causa de discapacidad para adultos mayores de 70 años. La Asociación Europea de Usuarios de Implante Coclear, de la cual la Federación AICE es socio fundador apuesta por una inclusión plena de los implantados cocleares.
El implante coclear no es solo una cuestión médica, es calidad de vida basada en la inclusión. Por este motivo se necesita mucha concienciación y visibilidad de este colectivo.

Los derechos de las personas con discapacidad usuarias de implante coclear deben respetarse, entre ellos la accesibilidad a la comunicación a través de sistemas de mejora auditiva como bucles magnéticos o FMs o subtitulación en audiovisuales y actos en directo. Solo así se podrá tener una inclusión real. En este sentido, los jóvenes lo tienen claro:
“Yo soy implantado coclear. Sumemos discapacidades, sumemos diversidad.”
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